A través de la Resolución 705/2022, la cartera encabezada por Carla Vizzotti actualizó las recomendaciones de cuidado generales para la prevención de Covid-19 y otras enfermedades respiratorias aguda y dispuso la flexibilización de algunas de las medidas que estaban vigentes desde 2020, cuando inició la pandemia.
En primer lugar, aconsejó continuar con el uso adecuado del barbijo en espacios interiores, incluyendo los ámbitos laborales, educativos, sociales y el transporte público. También asegurar la ventilación de los ambientes y mantener la higiene adecuada y frecuente de manos.
Señaló además que, ante la presencia de síntomas, se debe evitar el contacto con otras personas, no acudir a actividades laborales, sociales, educativas, lugares públicos y evitar el uso del transporte público.
Por otro lado, dejó sin efecto el distanciamiento social de dos metros y también la obligatoriedad del autorreporte de síntomas en la aplicación “Cuidar”.
Asimismo, para determinar la modalidad de prestación de servicios laborales -presencial o remota- de una persona, recomienda “la realización de una evaluación médica de riesgo individual con su correspondiente certificación, sin que sea suficiente su sola pertenencia a los grupos de riesgo previstos por el artículo 3º de la Resolución Ministerial Nº 627/20”.
En los considerandos de la norma, el Ministerio de Salud destacó que en el país se registran “nueve semanas consecutivas de descenso del número de casos hasta el momento actual” y ponderó los “avances significativos” del plan estratégico de vacunación contra el covid-19, que “ha logrado niveles de cobertura del 89,2% en población general y 93,7 % en niños de 3 años y más en primera dosis”. Además, se llegó al 80,1% de cobertura en población general y 84,1% en niños de 3 años y más de esquemas completos, y hay más de 15 millones de dosis de refuerzo aplicadas, “lo que significa una alta protección de la población para prevenir formas graves y mortalidad”.
De todos modos, señaló que “en forma simultánea se registra circulación de virus Influenza A (fundamentalmente del subtipo H3N2) en aumento desde el inicio del año 2022, lo que representa un adelantamiento del aumento estacional (el que coincide habitualmente con la temporada invernal)”.