El hallazgo fue cerca de las 10 de la mañana, en la zona este de la ciudad de Concordia. Los primeros datos del cruento hallazgo.
Mientras comenzaba la tarea de los efectivos del Gabinete de la División Criminalística y sus pares de la División Investigaciones, otros uniformados de la Comisaría 10° establecieron un cerco perimetral, alrededor de un baldío en inmediaciones de calles Espejo y Maipú, lugar donde un recolector de residuos dio con el macabro cuadro.
Siempre de acuerdo a las primeras precisiones que pudo obtener este medio, el cuerpo está incinerado casi en su totalidad y los autores de este hecho habrían utilizado cubiertas de automóviles para su objetivo, ya que los alambres de estos objetos quedaron sobre los restos humanos.